ABSTRACT
El término biopsia (gr. bios: vida, vital opsis: ver) se refiere al acto de obtener una muestra de tejido vivo con el fin de establecer un diagnóstico preciso mediante su análisis histopatológico[1]. Las biopsias se pueden realizar a través de una cirugía (biopsia abierta) o por medio de la vía percutánea (biopsia cerrada). La primera biopsia percutánea trastorácica reportada data de 1883, se obtuvo para el diagnóstico de un proceso infeccioso y en 1886 para el diagnóstico de una enfermedad maligna, en ambos casos, el procedimiento se realizó sin ninguna guía o ayuda imagenológica[2]. En la actualidad es un procedimiento común en la determinación de la etiología de una anormalidad o alteración focal. Las biopsias percutáneas pueden ser realizadas bajo guía imagenológica, usando una variedad de métodos como la fluoroscopia, el ultrasonido, escanografía y menos frecuentemente la resonancia magnética.